Una estructura de ficción, una composición fílmica a partir del trabajo de una colectividad inconexa e inexistente, es el núcleo del proyecto de OLIVER AÑÓN para el Espazo Anexo. Tal estructura es la de una pieza videográfica elaborada a partir de la colaboración de siete 'supuestos' autores. El proyecto aglutina, como añadido alrededor de la película, cuatro cortes de vídeo así como dibujos y textos, que funcionan como documentación acerca de los espacios o lugares de trabajo de cada uno de los autores que colaboran en la película.

En el lugar central del interior del Espazo Anexo se ha construido una pequeña sala de proyección, donde se exhibe en continuidad la película completa, compuesta a partir de los fragmentos de sus autores -esto es, el propio artista en un ejercicio de simulación y re-construcción. En torno a esta sala, y también dentro del espacio expositivo, cuatro monitores reproducen cortes de vídeo como documentación de cuatro de los autores del film colectivo: Tréroigne de Lacombe, Rodrigo Rodríguez, Jorge Amaru & Soledad Garibaldi, y Virginia Castellanos & Joséphine de Méricourt. Junto a éstos, dos mesas muestran dibujos con segmentos de imágenes que se corresponden con los estudios y lugares de trabajo de los otros tres autores: Raúl Esteche, Manuel Aveño y Anita Otto-Peters.

Más allá de la distinción genérica entre realismo y ficción, del documental como registro verídico de ‘lo real' frente a la fantasía de lo imaginario, la imagen videográfica aparece aquí configurada desde lo mestizo de una tecnología, desde un aparato para una construcción (no ya captura) de la imagen. Junto a la imagen que se ve, la reflexión; junto a un ojo sorprendido por el espectáculo, un ejercicio de recomposición de la imagen. Oliver Añón lleva a cabo una experiencia de reconocimiento a partir de la imitación -de ahí la referencia al loro en el título del proyecto- entendiendo la mímesis no sólo como un problema visual sino también ideológico.