Por vez primera en el MARCO de Vigo, el espacio del Laboratorio das Artes de la primera planta, habitualmente dedicado a las actividades didácticas y programa educativo para escolares, es ocupado por una exposición temporal. Con un objetivo principalmente didáctico, la versión facsímil de la muestra "El Lápiz Mágico", producida por The British Council, es el punto de partida para un programa de visitas guiadas y talleres infantiles que estarán en marcha en el MARCO durante los meses de julio y agosto.

Esta exposición muestra un total de 63 litografías y grabados digitales de obras de los ilustradores más destacados e innovadores del Reino Unido, conforme a la selección hecha por el conocido autor e ilustrador de libros infantiles Quentin Blake.

La ilustración no precisa de traducción, pero el hecho de verla a una escala diferente, a menudo sin texto, con colores más vivos y colgada de una pared, supone mirarla bajo otra luz. En Gran Bretaña existe una larga tradición en el diseño innovador de libros y en la ilustración, y la obra de anteriores generaciones de ilustradores es conocida y apreciada en todo el mundo. El Lápiz Mágico muestra cómo los ilustradores actuales reflejan las preocupaciones contemporáneas con idéntica fuerza y originalidad; y demuestra también, de modo incuestionable, que vivimos una segunda edad dorada de la ilustración británica.

Muchos de los nombres de los artistas incluidos en la muestra resultan familiares, como es el caso de Raymond Briggs, Tony Ross, John Burningham o Michael Foreman. Otros son representativos de otras tendencias más innovadoras en la ilustración de libros, como Lauren Child, que integra el uso de la televisión y de los collages fotográficos, o Sara Fanelli, que mezcla de modo experimental diferentes técnicas, o la fusión de la observación social y los textos de Posy Simmonds.

Algunos autores tratan temas que a menudo non se consideran propios de la literatura infantil. Por ejemplo, la obra War Boy, de Michael Foreman, que recoge súas experiencias de niño en Suffolk durante la Segunda Guerra Mundial. Otras obras son ilustrativas de las excelentes habilidades técnicas contemporáneas en este campo de la ilustración infantil: es el caso de las ilustraciones de Quentin Blake, los dibujos de Stephen Biesty, o la obra de Angela Barrett, una pre-rafaelita de hoy en día.

Un elemento fundamental de esta muestra es su carácter abierto y participativo. El programa educativo que la acompaña y la complementa -diseñado por la British Library, Kingston University y University of Surrey Roehampton, y coordinado por los educadores del MARCO- está dirigido al público infantil y a sus acompañantes adultos, a fin de que puedan experimentar con todos los elementos disponibles en la exposición: libros, ilustraciones, proyecciones, actividades didácticas, etc., teniendo siempre en cuenta la idea básica: un lápiz es siempre mágico.

El Lápiz Mágico es una oportunidade única para explorar el arte y la literatura, para reflexionar sobre el trabajo de los ilustradores y sobre su interpretación de las historias infantiles, y para descubrir cómo es un gran medio de expresión para niños y adultos de todas las condiciones y culturas.